Llevando desde el 19 de agosto (ruta nocturna en la que me hice daño en la muñeca) sin hacer una salida por campo y encontrándome mejor de la lesión, decidí pasarme por la sección de salidas por si alguien tenía intención de salir ayer martes día festivo. Como no vi nada, propuse yo hacer una ruta de wikiloc la cual desconocía por completo pero que parecía sencilla, lo que me venía perfecto para no forzar mucho.
Quedamos 3 valientes a las 10:00 de la mañana en la gasolinera de San Fernando de Henares, SirPaul con su flamante 1200, Yeyu con su ya conocida Elephant 900 y yo con queridísima 990. A Yeyu su mente privilegiada le pasó una mala jugada y se fue por la A1 hasta San Sebastian de los Reyes pensando que habíamos quedado allí. Mientras lo esperamos aprovechamos para desayunar tranquilamente y conocernos un poco más SirPaul y yo (suena regular pero sólo hablamos de motos y trabajo).
Empezamos la ruta como a las 10:35 con un ritmo muy tranquilo por carretera hasta que por fin llegamos a las primeras pistas a la altura de Alcalá de Henares. Las pistas eran muy sencillas y rápidas hasta que en Villalba (creo recordar) hubo una subida más picante. Seguimos por los laberintos de caminos entre campiñas, adelantando tractores y saludando a señoras mayores paseando, la complicación de esto era seguir el track de la manera más correcta posible ya que a la hora de descargarlo, sólo ofrecía la versión simplificada (500 puntos) y en numerosas ocasiones nos pasamos más de un cruce.
El ritmo de SirPaul era constante, manteniendo la distancia para no tragar mucho polvo, llevaba las TKC 70 y daba gusto verlo subiendo o bajando con ese bicho. Yeyu ha mejorado una barbaridad desde la primera y última vez que salí con él. Es asombroso ver como maneja esa moto. Y yo la verdad es que cogí confianza rápido con la muñeca que no me molestó en toda la ruta.
La parte más bonita de la ruta sin duda fue en la frontera entre la comunidad de Madrid y la de Castilla la Mancha, el resto no merece la pena destacar nada. La vuelta fue un poco aburrida porque fue casi todo el rato carretera. Entre medias, nos paramos en Pozo de Almoguera si la mente no me falla a tomarnos un refrigerio de cebada acompañado de unas rabas.
Ya entrando en Madrid, Yeyu nos propuso ir a un circuito que conocía él entre Vicálvaro y Coslada, al que solía ir él a entrenar con su supermotard. Estuvimos muy poquito rato, pero pegamos 4 saltos y un par de curvas que nos dejaron más a gusto que un arbusto.
Y por lo demás nada más que decir, ha sido un placer conocer a SirPaul y volver a coincidir con Yeyu, pero sobre todo haber podido disfrutar de un día como el de ayer a lomos de nuestras monturas.
¡Gracias compis!